Podemos decir que cuando debes ir a orinar más de 8 veces al día aprox. y más de 2 veces a la noche la frecuencia es ALTA, aunque déjame tranquilizarte porque este número depende de muchos factores: por ejemplo de la cantidad de líquido que bebemos, la edad, afecciones crónicas, lo que comemos, estación del año..
La Sociedad Internacional de Continencia (ICS) define este aumento de frecuencia miccional, más la sensación de no llegar al baño (o, directamente tener incontinencia) SIN infección del tracto urinario u otras enfermedades, como vejiga hiperactiva. Su impacto en la calidad de vida es significativo: y lo que al principio es algo manejable y hasta a veces “parte de la personalidad”, luego se hace totalmente “insoportable”.
Se siente una contracción en el pubis (la vegija está justo por detrás del pubis) muy fuerte con muchas ganas de orinar aunque no hayas bebido líquido, o hayas ido hace poco. Eso envía señales al sistema nervioso y le indica al cerebro que debemos orinar.
Es más frecuente que pase cuando hace frío o cuando estamos mucho tiempo sentadas, como puede ser un viaje.
¿Qué podemos hacer? A no desesperar: se recomienda en primera instancia descartar otras enfermedades con una historia clínica exhaustiva, hábitos, conductas, medicación, análisis de orina y cualquier otro estudio complementario útil. Así se puede llegar al diagnostico claro.
La vejiga de las mujeres tiene una capacidad de 350ml y en los hombres de 300ml. Entonces, ¿ por qué es más frecuente en las mujeres? Porque los factores asociados son lamentablemente más habituales en nosotras: constipación, prolapsos, síndrome genitourinario de la menopausia, ansiedad, depresión, obesidad, embarazos, apneas obstructivas nocturnas.
Si te diagnosticaron vejiga hiperactiva, te puedo aconsejar en cambiar hábitos:
- suprimir irritantes como el café y gaseosas, disminuir las gasas
- entrenar la vejiga
- manejo de líquidos
- mindfulness – técnicas de relajación y meditación
- kinesiología piso pélvico con entrenamiento de musculatura pelviperineal, equilibrios y tronco, TENS (electroanalgesia a veces), electromiobiofeedback, ejercicios respiratorios y terapéuticos, neuromodulación, manejo de conductas miccionales adecuadas a cada una.
- También hay tratamiento farmacológico y de cirugía mínimamente invasiva.
Hay múltiples opciones de tratamiento, es por ello que estes atenta a lo que sucede, así podes tomar riendas en el “asunto” y comenzar ya mismo a modificar rutinas para sentirte mejor.
No estás sola. Y siempre estás a tiempo.
Bibliografía recomendada: “The AUA/SUFU Guideline on the diagnosis and treatment ofidiopathic Overactive Bladder (2024)”